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lunes, 1 de agosto de 2011

Reforma institucional de Clístenes


Constitucion Clistenes.JPG

La principal innovación de Clístenes fue establecer como principio básico la «isonomía» o igualdad de todos los ciudadanos de Atenas ante la ley. Este principio menospreciaba los derechos en virtud de la herencia familiar (aristocracia) o de la riqueza (Timocracia de Solón).

La división mínima de los ciudadanos era el "démos" (plural: démoi), de los que habría ciento treinta y nueve, aunque no se entiende bien la función de los démoi. Toda la población se dividía también en treinta "tritía" (trittus, trittues) y cada tres tritias formaban una "tribu" (phyle, phylai), existiendo diez tribus. La división en diez tribus determinaba la participación política. Los miembros de una misma tribu estaban distribuidos por todo el Ática, es decir, no era una división geográfica. Dentro de cada tribu, se dividió también en tres regiones (costa, ciudad e interior), de tal modo que dentro de cada tribu existían personas de las tres regiones. Se cree que la intención de Clístenes fue mezclar a la población para que trabajaran codo con codo personas con diferentes intereses políticos.

Era corriente que los políticos, por ejemplo los miembros de la Bulé o bouleutas, fueran elegidos por sorteo. El sorteo es el sistema de elección típico de la democracia participativa, es decir, los antiguos griegos creían que cualquier ciudadano sin distinción estaba capacitado para la función política. Así, cualquier demôtas podía ser también un politês. El sistema opuesto hubiera sido la votación, en que los votantes eligen a "los mejores" (aristoi). El sorteo se aplicó también a la elección de los arcontes por la Ekklesía, pero se mantuvo la restricción a las dos primeras clases sociales, que también conservaban el privilegio del acceso a otra magistratura superior, la tesorería.

Ya que la Boulé se componía de 500 ciudadanos, cincuenta de cada tribu, así se obligaba a que todos los ciudadanos del Ática trabajasen juntos teniendo en cuenta los diferentes intereses de cada región y de cada tribu. Además, cada mes obtenían la presidencia de la Boulé (pritanía) los cincuenta representantes de una de las tribus, de forma rotatoria según el nuevo calendario. La Boulé promovía la discusión de temas en la Ekklesía, la convocaba y le hacía proposiciones de ley.

La Ekklesía o Asamblea de Ciudadanos, compuesta por todos los varones nacidos en Atenas, mayores de dieciocho años, discutía y votaba, teniendo la última palabra. Así, la Ekklesía se convertía definitivamente en el principal órgano de decisión en todos los ámbitos. Elegía también por sorteo a los miembros de la Heliea o Tribunal de Justicia, así como a los magistrados mayores (arcontes, estrategos, tesoreros, etc.) y menores (astinomios o del orden, agoranomios o de mercados, carceleros, etc). Todos los ciudadanos podían convertirse en magistrados, sin restricciones. Como hemos dicho, las magistraturas superiores se resevan a los propietarios ricos, si bien, estos deben desempeñarlas a favor de los intereses de la opinión pública.

El Areópago o Consejo aristocrático quedaba marginado de las grandes decisiones y reducido a órgano consultivo y consejero, o tribunal criminal de cuestiones de sangre. Se componía de los exarcontes, de modo que indirectamente los miembros eran elegidos por la Ekklesía.


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